Lipoescultura
Este procedimiento tiene como finalidad esculpir el cuerpo para darle una figura más estilizada. Esto se logra a través de la eliminación de los depósitos de grasa por medio de la succión en distintas partes del cuerpo, como cuello, papada, brazos, torso superior, abdomen, caderas, nalgas, muslos, rodillas y pantorrillas.
Candidatos
Cualquier persona sin problemas de salud es buen candidato a esta cirugía, sobre todo aquellas personas de peso relativamente normal que tienen una piel sana y elástica y áreas de grasa bien localizadas.
Es importante recalcar que la lipoescultura no es un tratamiento ni una cura para la obesidad, y que de ninguna manera sustituyen a una dieta balanceada ni al ejercicio.
Descripción del procedimiento
La lipoescultura se practica con anestesia general, bloqueo epidural o anestesia local con sedación.
Se hacen pequeñas incisiones escondidas, de aproximadamente media pulgada, que permiten alcanzar el área a tratar. Por medio de ellas, se pasa una cánula, un tubo hueco y de punta roma, que está conectado a una unidad de succión.
El cirujano manipula la cánula a través del tejido de la piel sobre el músculo y separa la cantidad de grasa que debe removerse. La unidad de succión genera presión al vacío que jala y saca la grasa del cuerpo. Luego se suturan las heridas, cuyas cicatrices desaparecerán en la mayoría de los casos.
Hay pacientes que pueden requerir, para mejorar el resultado final, que se reinyecte parte de la grasa succionada para aumentar y tornear los glúteos.
Antes de cerrar las incisiones, el cirujano decide si es necesario dejar drenajes, pequeños tubitos de látex, cuya función es evitar que se acumulen líquidos en el área para acelerar el tiempo de recuperación.
Riesgos
Las complicaciones de la lipoescultura son poco frecuentes. Entre ellas podemos mencionar:
-infección y sangrado
-mala cicatrización
-irregularidades u ondulaciones en la piel del área tratada.
En todos los casos, los riesgos pueden ser minimizados siguiendo las instrucciones del médico al pie de la letra.
Cuidados pre-operatorios
Para que luzcas un cuerpo fantástico, se te pedirá que durante al menos diez días antes del procedimiento:
-suspendas el consumo de cigarrillos y alcohol
– evites la aspirina y medicamentos que contengan ácido acetilsalicílico, vitamina E, omega 3, ginseng, gingko biloba
– no ingieras medicamentos herbales, super slim o ajo
-no comas absolutamente nada al menos durante las 6 horas anteriores a la cirugía.
Cuidados post-operatorios
Después de la cirugía, se pone una faja especial para comprimir la piel y reducir la inflamación y la decoloración. Si antes de la cirugía el paciente presentaba celulitis, esta no será eliminada por completo, pero mejorará notablemente. Es posible que las personas cuya piel no es tan elástica necesiten una cirugía para remover el exceso de piel después de la liposucción.
Al finalizar la cirugía, el paciente puede presentar dolor leve por 1 o 2 días y que se controla fácilmente con medicamentos.
Durante las primeras semanas posteriores a la operación, se observarán moretones e hinchazón que desaparecerán, y luego podrá apreciarse la nueva figura.
Aunque un día después de la cirugía el paciente está listo para caminar, no es recomendable que vuelva de inmediato a su rutina normal. Para permitir una pronta recuperación y cicatrización adecuada, hay qué evitar correr, nadar o agacharse, así como no exponerse de forma directa al sol por lo menos 2 meses.
